Todo comenzó con la implantación de la facturación electrónica en el ámbito de las instituciones públicas, ahora, la obligación de utilizar la factura electrónica se está extendiendo progresivamente al ámbito B2B.

La Unión Europea se ha fijado varios objetivos importantes para establecer de forma general la facturación electrónica: luchar contra el fraude fiscal, limitar las pérdidas financieras de los Estados miembros y controlar mejor la actividad económica de sus actores.

Europa, consciente de su influencia más allá de sus fronteras, sobre todo por su peso comercial, pretende aprovechar para exportar sus principios en materia de facturación electrónica a otros países.

En este documento, descubrirá la normativa actual y futura, los objetivos que justifican estas evoluciones, tanto para los Estados como para su empresa, los beneficios concretos que puede extraer de ellas y el apoyo que Generix Group le ofrece.